Gustavo Sáenz y Antonio Marocco juraron ante la Asamblea Legislativa como Gobernador y Vicegobernador de Salta por el periodo constitucional 2023-2027.
Había mucha expectativa por el discurso que emitiría el gobernador ya que de forma paralela una nueva era en la presidencia marcará la línea de trabajo provincial y municipal.
Expresó que en el próximo periodo al frente del Ejecutivo “nuestro estilo respetará los principios que hacen a nuestras prioridades: la defensa de los intereses de Salta; la capacitación de los salteños y salteñas en áreas que les den acceso a oportunidades de trabajo y de empleo; la llegada de obras y servicios a todos los rincones de la Provincia; la austeridad, la planificación y la previsibilidad; el respeto a los acuerdos, a las leyes y a las instituciones; el diálogo y el consenso con todos aquellos que defiendan los intereses salteños, frente a cualquier otro objetivo personal o político y la búsqueda del bien común”.
Además afirmó que en esta nueva etapa seguirá estableciendo acuerdos con las autoridades nacionales, “más allá de su signo político, para beneficio de Salta y su gente, defendiendo con fuerza nuestros derechos y mostrando que hay argentinos habitando en los rincones profundos de la Patria que trabajan y se sacrifican; que tienen sueños y esperanzas y que es nuestro deber lograr las condiciones para su desarrollo y su progreso”.
Enfatizó que “nuestros únicos enemigos son la pobreza y la desocupación” y hacia allí se deben encauzar los esfuerzos. Puntualizó que en Salta el Instituto de Estudios Laborales y del Desarrollo Económico de la Universidad Nacional de Salta, en nuestra Provincia, indicó que la pobreza bajó 8 puntos porcentuales, con relación a fines de 2019. “Queda muchísimo por hacer, pero es un indicador de que vamos por un buen camino”, consideró.
Al reflexionar sobre los tiempos muy difíciles que vienen para los argentinos, con un escenario económico muy complicado que multiplicará problemas y desafíos a los que enfrentar, dijo: “Los salteños nos seguirán viendo llegar a cada lugar de la Provincia, para que en persona nos cuenten de sus necesidades y esperanzas” y “dando las peleas que haya que dar contra lo que postergue o impida el desarrollo de Salta”.
Durante su discurso, el gobernador Sáenz enfatizó en el gran potencial del NOA y de la provincia. Por eso adelantó que peticionará ante Nación la continuidad del Gasoducto Norte “como factor de desarrollo y de calidad de vida”; “es una obra prioritaria”, indicó.
Estuvieron también presentes el arzobispo de Salta, Mario Óscar Cargnello, miembros de la Corte de Justicia, de Fuerzas Armadas, de Seguridad y Penitenciarias; de gremios, intendentes, entre otros.