Con voz quebrada y entre mensajes de WhatsApp enviados pasada la medianoche, Diego Pardo (46 años) relata su drama: diabetes crónica, hernia discal en tres vértebras, artrosis y ciática lo tienen al borde de una silla de ruedas. Su único salvavidas es un tratamiento con vitaminas B12 que no puede costear. Mientras vende golosinas en colectivos para mantener a su hija de 8 años, su cuerpo ya no responde.
«Cada ampolla cuesta entre $40 mil y $100 mil, y necesito 6 por mes durante 3 meses. Si no lo hago, los médicos me dijeron que quedaré paralizado», explica Diego, quien trabajó por 23 años arriba de los bondis salteños. Hoy, el dolor le impide hasta cargar su caja de alfajores.
Una vida de esfuerzo, un golpe inesperado
Diego vive con su hija en un humilde hogar en Salta capital. Su rutina era madrugar para subir a los colectivos, pero desde que la hernia discal comprimió sus nervios, apenas puede caminar. A su diabetes –que padece desde los 26 años– se sumó la artrosis lumbar.
«Hice todo lo posible: vendí cosas, pedí créditos, hasta fui a programas sociales, pero no alcanza», relata. Adjunta informes médicos que respaldan su diagnóstico: sin el complejo de vitamina B12, el daño neurológico podría ser irreversible.
Un llamado a la solidaridad
Diego no pide limosna, sino una oportunidad para seguir siendo un padre presente:
- Tratamiento requerido: 18 ampollas (3 cajas) en total.
- Costo estimado: $240 mil a $600 mil (según laboratorio).
- Contacto para ayudar: WhatsApp 387-5912181.
«Solo quiero trabajar y ver crecer a mi hija», repite. Mientras, organizaciones sociales ya comenzaron a difundir su caso, esperando que la comunidad salteña –famosa por su corazón solidario– responda.

