La Municipalidad de Salta volvió a poner el ojo sobre el transporte de pasajeros por aplicaciones y este miércoles desplegó un operativo sorpresa que dejó a más de un conductor en aprietos. El procedimiento, a cargo de la Secretaría de Tránsito y Seguridad Vial, se realizó en la avenida Bicentenario de la Batalla de Salta, donde inspectores detuvieron motos y autos que trabajan con Uber y DiDi para verificar si cumplían con toda la documentación exigida por ordenanza.
El objetivo fue claro: comprobar que tanto vehículos como conductores estén habilitados para prestar el servicio. Para operar mediante estas plataformas, los choferes deben presentar DNI autenticado, cédula del vehículo, licencia profesional vigente, domicilio electrónico, libre deuda de Automotores y certificados de antecedentes sin registros penales vinculados a delitos contra la integridad sexual. Quienes no cumplan con estos puntos, directamente quedan fuera del sistema.
Pero no solo los conductores deben ajustarse a normas estrictas. Los vehículos también enfrentan una larga lista de requisitos: antigüedad máxima, RTO al día, seguro reglamentario, inspecciones anuales para los que no requieran VTV y, como novedad, la obligación de portar un código QR único que acredite la habilitación y pueda ser verificado por inspectores o usuarios en cualquier momento.
El secretario de Tránsito y Seguridad Vial, Matías Assennato, fue contundente respecto al espíritu del operativo: «Buscamos que todos cumplan con las leyes. Queremos ser justos con todos y que puedan trabajar, pero cumpliendo con todas las condiciones. Vamos a intensificar este tipo de controles».
Como resultado, aquellos que no tenían la documentación obligatoria sufrieron la retención inmediata de sus vehículos, una medida que generó malestar entre algunos conductores pero que, desde el municipio, consideran fundamental para garantizar seguridad y reglas claras para toda la comunidad.
Desde el área adelantaron que los operativos continuarán de forma sorpresiva y en distintos puntos de la ciudad. La advertencia quedó clara: quien no esté en regla, queda afuera.