Tras el humo blanco que emergió de la Capilla Sixtina este jueves, el mundo conoció al sucesor del Papa Francisco: el cardenal Robert Francis Prevost, quien tomó el nombre de León XIV. Con un discurso que combinó esperanza y un firme llamado a la unidad, el nuevo Pontífice se asomó al balcón de la Basílica de San Pedro para dirigirse por primera vez a miles de fieles reunidos en la plaza y a millones de católicos alrededor del mundo.
Un mensaje de paz y justicia
Vistiendo la tradicional sotana blanca, León XVI hizo un «llamado a la paz para todos los pueblos» y pidió a los creyentes ser «seguidores de Cristo», asegurando que «el mal no prevalecerá».
«Les pido que construyamos juntos puentes de paz, que busquemos la justicia sin miedo», expresó con voz serena, mientras la multitud respondía con aplausos y vítores.
En un gesto que refleja su conexión con América Latina, el Papa dirigió un saludo en español a su «querida diócesis de Chiclayo» en Perú, donde sirvió como obispo antes de ser llamado a Roma por Francisco.
Un Papa con raíces estadounidenses y peruanas
Nacido en Chicago (EE.UU.) en 1955, Prevost tiene una larga trayectoria en Perú, país donde se nacionalizó en 2015. Llegó como misionero agustino en 1985 y más tarde se desempeñó como obispo de Chiclayo y administrador apostólico del Callao. Su cercanía con el Papa Francisco lo llevó a asumir en 2023 la dirección del Dicasterio para los Obispos, un rol clave en la Curia Romana.
El momento de la elección
La fumata blanca se alzó a las 18:08 horas locales (16:08 GMT), pero el nombre del nuevo Papa solo fue revelado una hora después, cuando el cardenal protodiácono Dominique Mamberti anunció en latín: «Habemus Papam».
Tras aceptar el cargo, León XVI pasó por la emotiva «Sala de las Lágrimas», donde vistió por primera vez las vestiduras papales. Luego, recibió el homenaje de los cardenales antes de aparecer en el balcón para impartir su bendición Urbi et Orbi.
¿Qué se espera de su pontificado?
Analistas vaticanos destacan que León XVI comparte la visión pastoral de Francisco, con un fuerte enfoque en la justicia social y la inclusión. Su experiencia en Perú y su dominio del español sugieren que América Latina tendrá un lugar destacado en su agenda.
Mientras Roma celebra al nuevo Papa, el mundo católico espera con expectativa los primeros pasos de un Pontífice que, desde su primer mensaje, ha hecho de la paz y la unidad sus banderas.