El oficialismo se garantizó el quórum y finalmente comenzó la sesión especial en la Cámara de Diputados para debatir el proyecto de ley «Bases», aunque aún persisten diferencias sobre la propuesta del Gobierno para tener autorización para privatizar cuarenta empresas públicas.
El presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, acordó con los jefes de bloques que la sesión, que demandará aproximadamente 35 horas, comenzaría a las 10 aunque luego se demoró unos minutos su inicio.
A lo largo de la jornada se definirá a qué ahora se irá a un cuarto intermedio, si se hará antes o tras la aprobación en general.
Asistieron a este encuentro, además de Menem, la vicepresidenta primera del cuerpo, Cecilia Moreau de Unión por la Patria (UxP); el vicepresidente segundo, el radical Julio Cobos; los presidentes de bloques de UxP, Germán Martínez; de la UCR, Rodrigo de Loredo; del Pro, Cristian Ritondo; de Hacemos, Miguel Angel Pichetto, y de la izquierda, Nicolás del Caño, entre otros.
Cómo será la sesión
Es la primera sesión que conduce el presidente de la Cámara de Diputados, el diputado por LLA por La Rioja, Martín Menem. Está previsto que el cuerpo tome juramento a los diputados nacionales Ernesto Ali (UxP-San Luis), intendente de La Toma que pidió licencia para asumir su banca de diputado, y Alida Ferreyra (La Libertad Avanza-CABA), que reemplaza a Diana Mondino, ministra de Relaciones Exteriores.
Posteriormente, el plenario del cuerpo legislativo tendrá su hora y media de cuestiones de privilegio y declaraciones políticas, previo al debate del dictamen de mayoría.
Los cambios al dictamen de mayoría que se redujeron de 524 a 385 artículos se leerán al comenzar el debate que es abierto con el discurso del presidente de la comisión de Legislación General, Gabriel Bornoromi.
Lo que sucede es que la LLA tiene 38 diputados y 7 aliados firmes, pero necesita el respaldo de las tres bancadas dialoguistas para aprobar cada artículo de la ley y eso no lo tenía garantizada en algunos capítulos, como la privatización de empresas públicas.
Hasta ahora tiene garantizados más de 140 votos para la aprobación en general y necesita reunir por lo menos 128 sufragios -teniendo en cuenta que Menem no vota- para imponerse en cada capítulo del dictamen de un proyecto que tiene 385 artículos.
Tras quitar el capítulo fiscal y el sistema de actualizaciones de jubilaciones, los principales puntos del dictamen de mayoría que se debatirán serán la declaración de emergencia pública, la reforma del Estado, y las privatizaciones de empresas públicas.
Por ese motivo, el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, mantuvo hasta conversaciones con los bloques dialoguistas para superar las diferencias sobre privatizaciones, seguridad, pesca, hidrocarburos, biocombustibles y aumentos de impuestos internos.
En cuanto a las facultades delegadas, el Gobierno aceptó limitar la emergencia pública de once a siete materias: económica, financiera, fiscal, de seguridad, tarifaria, energética y administrativa, aunque aún había un pedido de Hacemos y la UCR de eliminar la energética, tarifaria y de seguridad.
Sobre las privatizaciones, el Poder Ejecutivo propone vender todas las empresas públicas -con excepción de YPF- y en el caso de Nucleoeléctrica, Banco Nación y Arsat se estableció que el Estado solamente puede realizar una privatización parcial, debiendo mantener el control de la empresa.
Ahí el radicalismo quiere que haya un compromiso para que el Gobierno envíe un proyecto por cada empresa que quiera privatizar, y Hacemos quiere eliminar de esa lista al Banco Nación, Arsat y Nucleoeléctrica.