Tras días de intensas lluvias, el sol vuelve a brillar en Tartagal, y con él, el progreso. Esta semana comenzó el tan esperado asfaltado en los barrios San Juan, TGN y El Ceibo, marcando un hito para comunidades que durante décadas reclamaron infraestructura básica.
«Un cambio que se ve y se siente», expresó Rosario, una vecina de la zona, mientras observaba las máquinas trabajando en lo que antes era un camino de tierra, intransitable en épocas de lluvia. «Es un sueño hecho realidad», agregó Fátima, otra residente de San Juan, emocionada al ver cómo su barrio comienza a transformarse.
Estas obras no solo mejoran la movilidad, sino que también impactan directamente en la salud, seguridad y calidad de vida de miles de tartagalenses. El proyecto se enmarca dentro de un plan integral que incluye redes de agua potable, cloacas e iluminación, impulsado por el municipio en conjunto con el gobierno provincial de Salta.
«Estamos cumpliendo con vecinos que esperaron décadas. Tartagal avanza con hechos concretos», destacó el intendente Franco Hernández Berni durante su última recorrida por las obras. Con estas acciones, se refuerza el compromiso de que «ningún barrio queda atrás», cerrando la brecha histórica de desigualdad en el acceso a servicios básicos.
Mientras las máquinas avanzan, los vecinos celebran un futuro en el que la lluvia ya no será sinónimo de aislamiento, sino de calles firmes y una ciudad que crece para todos.