El Gobierno nacional oficializó una modificación en el régimen de armas que habilita la compra y tenencia de fusiles semiautomáticos de uso civil condicional. La medida entró en vigencia tras la publicación de una nueva resolución en el Boletín Oficial, que deja sin efecto la prohibición previa sobre este tipo de armamento.
De acuerdo con la normativa, el Registro Nacional de Armas (RENAR), organismo dependiente del Ministerio de Seguridad, será la autoridad exclusiva encargada de fiscalizar y otorgar las autorizaciones correspondientes bajo el marco de la Ley Nacional de Armas y Explosivos Nº 20.429.
La resolución permite que legítimos usuarios y entidades de tiro puedan adquirir armas semiautomáticas alimentadas con cargadores removibles —como fusiles y subametralladoras basadas en diseños militares— de calibre superior al .22 LR. No obstante, la habilitación estará sujeta a un proceso de evaluación estricta, que incluye la justificación deportiva, la identificación precisa del material, documentación probatoria y declaraciones juradas, con el objetivo de garantizar la trazabilidad y el control sobre cada unidad adquirida.
La medida profundiza un cambio iniciado en junio de este año, cuando el Gobierno derogó un decreto de los años ’90 que restringía casi por completo la posibilidad de que civiles accedieran a este tipo de armamento. Hasta entonces, solo podían obtenerse permisos excepcionales otorgados por el Ministerio de Defensa, autorizaciones que rara vez se concedían.
Con el nuevo esquema, el Gobierno sostiene que se busca reemplazar la prohibición general por un sistema de control más específico, centrado en el uso deportivo regulado y la supervisión directa por parte de las autoridades registrales.
Desde el Ministerio de Seguridad señalaron que la medida “fortalece los mecanismos de control y documentación, evitando la informalidad y garantizando trazabilidad absoluta del material autorizado”.