Cada 25 de noviembre, el mundo entero detiene su ritmo para recordar que la violencia contra las mujeres y diversidades sigue siendo una de las violaciones a los derechos humanos más extendidas y persistentes. Esta fecha, establecida por Naciones Unidas, invita a reflexionar, visibilizar y asumir un compromiso activo para erradicar todas las formas de violencia de género.
En este nuevo 25N, organismos públicos, instituciones educativas, organizaciones sociales y comunidades de todo el país —y particularmente de Salta— renuevan su compromiso con la construcción de entornos más justos, seguros y libres. La jornada no solo recuerda a las víctimas, sino que también interpela a la sociedad entera: la violencia de género no es un problema individual, sino una problemática estructural que afecta la vida cotidiana, el acceso a derechos, el desarrollo y la libertad de miles de mujeres y diversidades.
Especialistas y referentes coinciden en que escuchar, creer, acompañar y actuar salva vidas. El abordaje integral de la violencia requiere políticas públicas sostenidas, redes comunitarias fuertes, instituciones comprometidas y una ciudadanía solidaria capaz de identificar, prevenir y denunciar situaciones de riesgo.
A lo largo del día, distintas iniciativas buscan profundizar el debate y promover la sensibilización: marchas, conversatorios, campañas de prevención, intervenciones artísticas y espacios de formación que apuntan a transformar prácticas culturales y promover relaciones igualitarias.
El mensaje que atraviesa esta fecha es claro y urgente: solo una sociedad que protege, acompaña y garantiza la igualdad puede construir un futuro libre de violencias. El 25N nos convoca a asumir un rol activo, todos los días, para que mujeres y diversidades vivan con libertad, dignidad y sin miedo.